#19 Estoy de acuerdo contigo, pero aceptar el dinero que el Estado destina por número de delegados para gastos extraordinarios, que no ordinarios, no creo que sea muy criticable desde el punto de vista del mantenimiento de la independencia. Lo importante es financiarse SIEMPRE con fondos propios, y no depender nunca de las subvenciones estatales.
Yo lo veo así, y no me siento avergonzado por ello. Ten en cuenta que, al margen de CNT, los otros sindicatos anarcosindicalistas no han tenido acceso al patrimonio sindical, de forma que sólo han tenido dos formas de acceder a locales sindicales: la ocupación y el alquiler.
En mi tierra no es el caso, pero no me parecería mal que el alquiler de una nueva sede se pagara con fondos del Estado, hasta que sea capaz de financiarse con fondos propios, por ejemplo.
#16 No me parece lo mismo aceptar una indemnización puntual que una subvención anual. Lo segundo te hace dependiente del dinero que recibes y de quién te lo da, acaba siendo indispensable para el mantenimiento de la organización y tiene unas consecuencias que están a la vista de todos.