Las campañas de mecenazgo colectivo, más conocidas por el término inglés crowdfounding, llegan a la biomasa. El Centre de Transfèrencia Tecnològica de la Universitat Politècnica de Catalunya y la ONG Misión y Desarrollo para Goundi (población de República de Chad) llevan veinte años colaborando en la mejora de la calidad de vida de sus habitantes.
Contar con un terreno productivo, asistir a un curso de aprendizaje agroecológico, cultivar frutas y hortalizas para autoconsumo e incluso vender esta producción. La creación de un banco de tierras y un proyecto de custodia del territorio y autoempleo, impulsados ambos por la asociación Red Terrae, han permitido que estos pasos los emprendan 1.058 personas en 88 parcelas repartidas en 60 hectáreas. No es el único proyecto de este cariz que se desarrolla en España, pero sí uno de los más dinámicos y participativos.
El Boletín Oficial del Estado publicó ayer la lista de empresas a las que se asigna cantidades concretas de producción de biodiésel por un período de dos años. Aunque tarde, según viene denunciando APPA Biocarburantes, el Ministerio de Industria, Energía y Turismo cumple con la orden de asignación de cantidades y, tras un período de alegaciones, solo admite 42 solicitudes de las 107 recibidas, dejando fuera a todas las plantas argentinas e indonesias que se presentaron (la orden se modificó para que pudieran entrar industrias de estos países).
La feria Expobioenergía constata la bonanza de la biomasa térmica. Una red de calor en Granada se abastece únicamente con hueso de aceituna. La biomasa también calienta agua sanitaria en Canarias La bioenergía deberá cumplir con criterios obligatorios de sostenibilidad. “Esperamos que no llegue el Gobierno y como ha ocurrido con el autoconsumo de electricidad imponga que hay que pagar un peaje o un impuesto más por instalar calderas de biomasa y abastecerlas con pelets”.
Los disparos no respetan ni al animal más rápido del mundo, que además habita en Madrid, en plena capital, donde hay censados siete nidos en edificios. De uno de ellos, situado en el distrito de Latina, echó a volar el pasado año uno de los tres pollos que tuvo la pareja de halcón peregrino, una especie protegida y ave rapaz capaz de alcanzar los 300 kilómetros por hora.
Y vida también, entre otros, para la paloma rabiche, cedros y brezos de Canarias, el quebrantahuesos, la perdiz pardilla y para los ríos Ter, Fluviá y Muga. Todos son lugares y especies agraciados con proyectos aprobados dentro de la última convocatoria del programa Life+ de la Comisión Europea en el apartado de naturaleza y biodiversidad.
Hace un mes, Zakri Abdul Hamid, presidente de la Intergovernmental Science-Policy Platform on Biodiversity and Ecosystem Services (IPBES), expuso ante 450 expertos mundiales en biodiversidad reunidos en una conferencia en Trondheim (Noruega) las consecuencias negativas que supone para la salud y el bienestar de la humanidad la pérdida de variedades de cultivos y razas de ganado. Afirmó, con respecto a estas últimas, que “la tasa de razas en peligro de extinción está bajando, pero los datos más recientes la cifran en el 22%”.
Casi 3.000 personas aportan voluntariamente datos relevantes sobre las poblaciones de 407 especies de aves en España, alguna considerada en peligro crítico de extinción. Se publica el primer 'Atlas de las aves en invierno en España'
Este país no tiene arreglo. Y no lo tiene porque los ciudadanos no tienen ganas de cambiar nada. A currar en negro y a ver fútbol. País de pandereta.
Producir un kilo de carne consume 16.000 litros de agua, además de un considerable gasto energético y de otros recursos (suelo, vegetación, etcétera) y de emitir gases contaminantes. Si además ese kilo de carne acaba en la basura, se comete un crimen ambiental y social muy grave. Dicho crimen no se hace solo con un kilo de carne, sino con 1.300 millones de toneladas de comida al año.
“Estamos hartos de los brindis al sol de Arias Cañete”. Esta frase se oye de forma recurrente dentro de los diferentes sectores que conforman la bioenergía española: biogás, biomasa y biocarburantes. La gota que ha colmado el vaso es la petición ayer, en Bruselas, por parte del ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, de rebajar el límite del 5 % que la CE quiere poner a los biocarburantes de cultivos. Sin embargo, hace unos días, el Gobierno de Mariano Rajoy aprobó un RDL que recorta drásticamente la obligación de incorporación
Madrid-Río será la próxima parada y fonda de A ver Aves. El jueves 14 de febrero (sí, el día de San Valentín) nos enamoraremos, junto a alumnas y alumnos del instituto de educación secundaria (IES) San Isidro, de las aves que nos encontremos en esta elongada zona verde, que comienza a las puertas de la Casa de Campo y termina en el parque Lineal del Manzanares. Tamaño corredor permite sorprenderse, además de con las especies habituales, con algún águila real sobrevolando el estadio Vicente Calderón o con bandos de grullas que regresan al norte.
El proyecto AgriClimateChange demuestra que se pueden reducir a la mitad las emisiones de gases de efecto invernadero. Worldwatch Institute: “La agricultura orgánica tiene el potencial de contribuir a la seguridad alimentaria sostenible”. La UE lanza a consulta un nuevo plan de acción para la agricultura ecológica.
Podría ser una licencia para hablar de la lucha que mantiene la escuela pública y su Marea Verde contra los recortes y anteproyectos de ley varios, pero no, en este caso el verde se refiere a los parques y zonas no urbanizadas del barrio de Marroquina, en el distrito madrileño de Moratalaz.
Nueva inmersión lúdico-naturalista en un área verde urbana que tiene al “pirulí” de RTVE, la M-30 y las cocheras de la EMT como referencias geográficas poco naturales (habría que añadir el macro-cementerio de la Almudena), pero que, por lo visto y oído, a las aves urbanas ni les va ni les viene. Así que, alumnos y alumnas de coles e institutos cercanos, entremos en el parque de La Elipa con Aver Aves.