Supongo que todo cuadra con el momento histórico que nos ha tocado vivir: los países más contaminantes y que menos respetan el medio ambiente son, a su vez, aquellos que promueven una sociedad de consumo: nadie quiere abandonar el barco de la bonanza económica. Un mayor respeto hacia el medio ambiente implicaría que gente con inversiones millonarias perdiese una gran suma de dinero. Y puestos a elegir entre un beneficio inmediato y un mal futuro, el hombre -por desgracia- tiende a elegir lo primero.
Si está claro: el hombre no es bueno ni malo por naturaleza. Es, símplemente, egoísta.
Es como aquello de que existen dos tipos de pareja: las parejas-pluma, que son las que logran levantarte cuando estás cayendo, y las parejas-plomo, que tienden a hundirte en tus mejores momentos.
No creo que haya "vampiros psíquicos", símplemente que la gente descarga sus frustraciones como puede. Unos maltratan físicamente. Otros, símplemente intentan ahogar con su pesimismo a los que tienen a su alrededor...