La falta de serenidad y la inmadurez en nuestras mentes nos ha llevado al caótico mundo actual. Naces consciente, y mueres absolutamente inconsciente. Si conserváramos la consciencia y la cultiváramos, no ocurrirían ni las bromas patéticas, ni las venganzas absurdas. Todo esto nos lo provoca el infinito aburrimiento en el que nos sumerge el ego. No sabemos qué hacer con nosotros mismos, y fastidiar al prójimo se puede convertir en nuestro hobby.

#1 Gracias por tu comentario. Tienes razón, voy a ver si lo arreglo:).

#1 Hola!. Lo siento, no conozco las localizaciones.