En el sector de la hostelería es donde más historias para no dormir me han contado. Pasarse un año entero sin un día libre, sueldos en B, jornadas de 12 horas por decreto, acosos por parte de jefes, impagos del sueldo, clientes gilipollas... No me extraña en absoluto el titular.
Lo de siempre, gilipollas enmascarados destrozando bienes ajenos aprovechando la impunidad del ambiente. Retrasados mentales que gustan de ensuciar causas justas. Ante la situación que se ve en ese vídeo, yo habría hecho lo mismo que la conductora.