#2 ¡Menos mal que andamos sobrados de expertos!
No, en serio, si hay algo que realmente me cabrea es ver a otro como yo (es decir, alguien que no es político, banquero, poseedor de título nobiliario, clérigo o similar) soltando la manida frase de "XXXXXX no sirve de nada". Sustitúyase "XXXXXX" por "las huelgas", "protestar", "votar", "organizarse en asociaciones", etc.
Esta fabulosa casta de iluminados (de la que España, mi país, anda perfectamente equipada) tiene muy claro que nada sirve de nada. Al menos nada que no provenga de ellos mismos. Lástima que ellos NUNCA inician nada, sólo critican a los que sí lo hacen.
Porque, suponiendo que tuviesen razón y nada de lo que se ha hecho hubiera servido para nada (algo con lo que estoy profundamente en desacuerdo), al menos se equivocan en una cosa: si no se hubiera intentado, nunca se habría sabido.
Así que nada, a seguir satisfechos de nuestra infinita sabiduría y a permitir a los demás que puedan alimentarse de ella en pequeños foros como éste. Pero sin movernos. Total, como no sirve de nada... ¿no?
"Los filósofos no han hecho más que interpretar de diversas formas el mundo, pero de lo que se trata es de transformarlo." Karl Marx.
P.D.- #9 y #10 ¡Bravo!
#2
Que no ha servido de nada? Yo he sido tremendamente crítico con el 15M, ya que estoy organizado en distintas organizaciones. Sin embargo ha sido el 15M el que ha iniciado el ciclo de movilizaciones actual, ha sido en el que en su momento dio un golpe sobre la mesa para materializar el malestar de miles de personas y ha sido la oportunidad de mucha gente para politizarse y darse cuenta de que hay alternativas. Esta claro que las alternativas no han salido de la nada, como algunos activistas del 15M creían al principio, como si las reivindicaciones en favor de las mayorías trabajadoras nacieran un 15 mayo y no fueran fruto de una lucha obrera de siglos. Pero sin embargo eso a servido para organizar mucha gente en la PAH, en el movimiento estudiantil, en las luchas sectoriales de sanidad, educación y transporte, en los barrios, en las huelgas generales y hasta en sindicatos y partidos políticos.
Esta claro que eso de la "Revolución" que sonaba en las plazas era infantil, fútil e ingenuo, pero tenemos que agradecer muchas cosas al 15M, no por lo que decía ser (o lo que los mass media decían que era) sino por lo que ha aportado a las distintas luchas en una sociedad muy adormecida y apoltronada.