Eso, venga seguid apretando al maquinista a ver si le sancionan, a los pobres angelitos pintores no les digáis nada no sea que vayan a sufrir un trauma.
Mientras tanto, a seguir pagando el 1500000 e que cuesta anualmente la limpieza de pintadas de los trenes de estos gamberros. En vez de rociarles con el extintor, tendrían que cortarles una mano y así aprenderán.
Un par de ostias bien dadas a tiempo solucionarian el porvenir de estos vándalos. " el árbol hay que enderezarlo cuando es joven, por qué cuando es viejo ya no hay manera, se rompe"