La situación es para salir a la calle con escobas, barrer la suciedad y ponerla ante las sedes de partidos, ayuntamientos y las Cortes. Como forma de llamar la atención sobre la situación española, en manos de un Gobierno que no escucha. Que no da la cara, que da la espalda al pueblo que lo votó.
Admiro al decisión de estas mujeres en la tercera marcha de la minería. El año pasado fueron ellos quienes caminaron hasta Madrid. Tras veinte días de caminar, su lucha fue en vano. Deseo que ellas, con la fuerza de la razón cnsigan que se estudie la reconversión de la minería