A mí no me saltó el aviso, pero claro, cuando voy a dormir le quito el internet al móvil. Mi suegro, que es de los que llevan siempre conectados internet, gps, bluetooth, nfc,... (y se quejan de que la batería le dura muy poco) sí se despertó con los pitidos.
Cómo acertó Germán con su comparsa
La Conferencia Episcopal
ha financiado mi nuevo hogar,
un ático a lo Rouco Carela.
Divino lujo tan celestial
libre de impuestos,
que pagarás gracias
a tu X de la renta...