#2 Tienes toda la razón.
Tres personas escucharon que se había encontrado un elefante. Ninguna de las tres sabía qué aspecto pudiera tener un elefante, pero, como no tenían nada que perder y sí algo que ganar, lo reclamaron describiéndolo el primero como una especie de árbol, el segundo como una especie de cuerda y el tercero como una especie de serpiente.
Llegados a la oficina de elefantes perdidos el primero señaló las patas del elefante como prueba de que su descripción era correcta, el segundo hizo lo mismo mostrando la cola del paquidermo y el tercero, naturalmente hizo lo propio usando la trompa como "prueba".
Y ahí siguen, más ciegos que los ciegos de la historia original, pretendiendo cada uno que un elefante es un árbol, una cuerda o una serpiente.
Hay algunos medios que se dedican al servicio de la Verdad demostrando que un elefante no es un árbol. Y no faltan imbéciles que encuentran esa labor "imprescindible"...
¡Ay Alemania que los cancilleres se te hacen "fuhreres" a la que te descuidas!