#2 No lo celebrarás tú, porque yo sí, que para eso es mi cumpleaños y toda mi santa vida ha sido fiesta -privilegio adquirido tras correr el riesgo de llamarme Inmaculado, si eso no es justificación...-.
#2 No lo celebrarás tú, porque yo sí, que para eso es mi cumpleaños y toda mi santa vida ha sido fiesta -privilegio adquirido tras correr el riesgo de llamarme Inmaculado, si eso no es justificación...-.
El gran problema es que falta gente en las plantillas de correos, lo que se traduce en que el mismo cartero se encarga de varias rutas a lo largo de la semana, de forma que no hay reparto diario en esas rutas, sino cada varios días. El correo se acumula y con ello el tiempo que el cartero se puede tirar organizando el correo ordinario y repartiéndolo -la hora de salida a repartir te la termina marcando que tengas organizado el correo-. Entregar un paquete o notificación te lleva mínimo 5 minutos -si no más-. En cuanto tienes que entregar diez paquetes se te va una hora de reparto. No les justifico, porque a mí también me jode, pero la culpa no la suele tener el cartero -que en algunos casos sí que hay carteros cabrones-, sino la escasez de recursos.
PRI-VA-TI-ZA-CIÓN y DES-CON-TROL
Eso es lo que pasa.
Y a los que nos dejamos los codos en el instituto en su momento, que luego nos sacamos un par de carreras y que hemos terminado invirtiendo los últimos cuatro años en hacer un doctorado, ¿qué nos van a dar? Vergüenza de país.
No solo en la UPM. Se va a dar el caso en muchas más universidades, por ejemplo, la UAH.