Vaya caterva de retrasados mentales sobre estas líneas. (Se salvan cuatro) ¡Qué tristeza ver a tantas personas juzgando sin conocer los detalles, sin saber lo que pudieron sentir esas mujeres! Está claro que lo que hay es mucho Wenstein que lo que no tiene es poder...
Una pérdida tremenda para el periodismo local.