Tenemos que limitarnos a los asuntos a los que somos más sensibles, con la condición de que logremos alcanzar suficiente información que fundamente nuestro punto de vista.
La mayoría no somos sensibles a la corrupción, por eso no "nos importa", aunque si de mucha rabia...
Luego querría ver yo cuantos de la OCU pedirían una botella mineral cuando entren en un restaurante y vean la jarrita...