Aquí, el texto traducido:
La compañía Movistar asume el error de seguir facturando el teléfono móvil del joven de Alpicat (Lleida) muerto en diciembre del año pasado. Fuentes de la compañía consultadas este viernes por Segre Radio aseguran que la documentación aportada por los familiares del joven no habrá llegado al departamento correspondiente, y por tanto, el sistema automático de facturación ha seguido trabajando sin cambios. Por esta razón, los padres del joven han seguido recibiendo las facturas de un móvil que, desde el día de la muerte del joven, está apagado.
Las mismas fuentes han asegurado que la normativa es muy clara. Cuando una persona muere, el contrato se rescinde en 24 o 48 horas después de recibir la fotocopia del DNI y la partida de defunción y solo se factura la parte proporcional de la línea de teléfono hasta el día de la baja. Así, Movistar acepta que se trata de un error que para los padres ha estado un calvario, ya que han intentado darlo de baja pero la compañía alegaba que su hijo firmó un contrato de permanencia hasta el 2010 y les reclamaba 280.
Es una pena, pero así funcionan siempre las cosas...