El titular es como mínimo engañoso: leyéndolo parece que vayan a montar un campo de tiro en la escuela. Luego resulta que es un programa para evitar casos como el del crío que disparó a otro al coger un arma que encontró en la calle. Me parece normal que en un país en el que las armas de fuego están tan extendidas se quiera concienciar a los niños para que no las toquen en caso de encontrarse una.
Pues le está saliendo mal la jugada al honorable caballero.