La masa es tonta, el individuo no, dijo un sabio. Yo un seguidor y admirador de un también sabio, llamado Richard Dawkins, no creo en las prohibiciones ni en las venganzas. Pero creo firmemente que las religiones no han sido más que un problema para el mundo entero desde sus inicios, portadoras de guerras, licencias para los que las representan, que los demás no tienen. Pongamos por ejemplo Israel, palestina es un problema de los gordos. Llevan 2000 años pegándose. No más pábulo a los dioses, nuestra pleitesía, es lo que las hace fuertes. Las supercherías, son el diablo de la ciencia. Niños a los que se les enseña la creación de la Tierra literalmente como, está explicada en el antiguo testamento. Judíos que no respetan otra ley, que no sea la del talmud. Musulmanes que creen que la vida después de muertos, será mejor que la que tienen. La culpa, es de todos.
El otro día, estaba en la plaza de mi pueblo, con mi hija de cinco años. Un niño que es mestizo, mitad árabe, mitad español. Que curiosamente mi mujer y yo somos amigos de su tía. Estaba rodeado por media docena de niños, que le gritaban Moro, Moro, Moro. Yo monté en cólera, me levanté y los disolví. Ningún otro adulto dijo nada.