#2 ¿De verdad oyes ahí a una orquesta? Yo lo encuentro muy creíble, y desde luego muy interesante. Lo que es seguro es que no es España, aquí se les multaría por desorden público o algo así.

¿Y eso no es apología del terrorismo? En España no tenemos dobles raseros, no? Por suerte para ella la estulticia no es delito, hasta se puede ser presidente del gobierno. Y de los insultos ya tal.

Un gran escritor, si señor. Por cierto, lo de votar irrelevante es de escándalo, pero sensacionalista... ¿en serio?

Mucho Pepephone, mucho Pepephone, pero en todos sitios cuecen habas. Eso si, hasta ahora veo menos problemas con ellos. Pero haberlos haylos. Como que te cobren diez euros por no usar una tarifa prepago "sin gasto mínimo" o que hagan una portabilidad en plan pirata que fue cancelada en plazo legal, y sin que se pueda hacer nada para evitarlo ni echarlo para atrás. Y esto no son cosas que yo haya oído, me han pasado a mi.

Si, es cierto que tiene su encanto. Pero llamarlo animación parece un poco excesivo. Y lo de la princesa, bueno, es una sorpresa, sin duda.

Zorglub lo hizo.

Era un chaval popular, seguro. Si hubiera sido el empollón de la clase se habrían reído de él y le habrían quitado el desayuno. Ojalá me equivoque, pero no lo creo.

¿pero qué entendéis por obscena? Se nos ha colado el opus por aquí...

#44 La traducción al español es pésima. Prueba en inglés.

Si no fuera por la contribución de Turing al descifrado de la criptología alemana, muy posiblemente hoy no existiría Inglaterra.

Si no es delito lo de "chupa, chupa, que yo te aviso", ¿por que iba a serlo esto? Es otro engaño y ya está.

#4 Es una viñeta... ¿de humor? aquí nos reímos por no llorar, y no por Forges, que de forma genial describe la situación actual, si no por esa misma situación. Vamos hacia atrás.

¡Mas madera! ¡Mas madera!

¿Temer? Si son inteligentes, y lo serán para permanecer en el poder, le tendrán respeto. Pero querer acabar con internet... ni de coña. Es la herramienta perfecta para el control de masas.
Nosotros mismos les damos nuestros datos, el reconocimiento de nuestras caras para usarlo luego en las videocámaras de las calles, nuestras costumbres...
Lo de que lo temen es un bulo para que nos creamos con poder. Y el poder está ahí. Otra cosa es que sepamos aprovecharlo, lo que es así en el caso de una minoría. El aborregado de la TV será el aborregado de Internet. Para pensar hace falta querer hacerlo.

A mi lo que me llama la atención es el contraste del envío de. rumor mediante SMS con la creencia de poder convertirse en piedra.