Publicado hace 15 años por --78301-- a democraciaypaz.wordpress.com

Este artículo analiza la evolución del gasto público social por habitante (un buen indicador del nivel de desarrollo social) en España durante el periodo 1993-2008 mostrando que, en términos comparativos con otros países de la Unión Europea de los Quince, tal gasto ha crecido menos que el promedio de la UE, y ello debido a unas políticas de austeridad de gasto público iniciadas por el Sr. Solbes en 1993 y seguidas por el Sr. Rato de 1996 a 2004, reflejando una postura liberal que ha retrasado el desarrollo de las transferencias....

Comentarios

Fingolfin

No hay por donde cogerlo...

"la resistencia mostrada por el Sr. Solbes al mayor incremento de gasto público, que le inhabilitó al responder a la crisis financiera y económica actual."

¿Meloexplique? España está en déficit y aumentando su deuda pública brutalmente (es decir, gastando más de lo que ingresa), de hecho ha gastando tanto que ya no queda margen para gastar mucho más (banco-espana-avisa-no-hay-margen-para-reavivar-economia-mas), probablemente porque se han detectado pocas ganas de comprar deuda española en el mercado, y tenemos el riesgo de llegar al tope de lo permitido por la UE en pocos años (60% del PIB), habiendo partido de una hacienda pública muy saneada.

En otras palabras, que no se de donde vienen las quejas de que Solbes se resistió a gastar dinero. ¿Dónde está esa resistencia?

"Esta requiere economías keynesianas en lugar de las socioliberales que han definido las políticas económicas y fiscales de España desde el año 1993."

Pues yo diría que precisamente lo que se está aplicando ahora son tesis keynesianas: Gasto público. Si no se estuvieran aplicando, el estado habría recortado gastos y no tendríamos tanta deuda. Como efectivamente hizo aznar en el 96, y no tanto por gusto (como les gusta pensar a algunos), sino porque era imprescindible para entrar en el euro.

Aparentemente hay que repetir una vez más que para tener servicios públicos en primer lugar hay que tener una economía y unas industrias a las que poder cobrar impuestos, algunos parecen empeñados en creer que la clave para vivir como en Alemania es subir los impuestos y, alehop, el bienestar surgirá debajo de las piedras.