Pues efectivamente lo que tendríamos que hacer este verano todos los madrileños sería entrar en masa a las iglesias y hacer reuniones de colegas y estar ahí dentro como estaríamos en un parque, hasta que nos pongan árboles y sombras fuera. Invitados estamos.
Y fuentes, bancos, aceras y plazas en favor terrazas. La mierda de ciudades que ha creado la derecha.