Serían como las ocho de la mañana cuando un diminuto fantasma apareció en mi cama. Yo, con los ojos pegado y recién caída de la nube del sueño, pensé "mmmgggépasa...", y entonces lo vi. Una sábana que recorría mi cama de derecha a izquierda.
Cuando enfoqué, vi que era mi propia sábana. Y como es una sábana con estampado de Betty Boop, me tranquilicé bastante porque, que yo sepa, los fantasmas no usan sábanas estampadas. Ni dicen "miau". Sí, aquél extraño fantasma era muy bajito y decía "miau... miau..." mientras se desplazaba de un lado a otro de mi cama. En un acto de puro arrojo, levanté la sábana. Se trataba de Mimosa, mi gata, que se había metido a dormir conmigo, se había enrollado en el embozo de la sábana y la pobre no sabía salir. Tan pronto la liberé, me lo agradeció a besitos y se me tumbó encima para seguir durmiendo los cinco minutitos de rigor.
Vivir con un gato es una aventura constante.
#39 Si mi hija se salta los controles que le tengo puesto, 1 mes sin restricciones le permito como premio. Durante ese mes creare un buen campo de minas aunque no creo que tenga tantas ganas de estudiar los manuales del router, android y Ubuntu en su ordenador aparte de conseguir las contraseñas con algún keylogger en los tres dispositivos pero si lo consigue le daré mi enhorabuena y el premio del mes libre