Hace 7 años | Por averageUser a theguardian.com
Publicado hace 7 años por averageUser a theguardian.com

Stephen Leyland, de 64 años, se ha convertido en un atípico objetivo de amenazas de muerte a pesar de "no conocer a ningún yihadista" después de que una fotografía suya sonriendo frente a su puesto de flores terminara apareciendo en la revista Rumiyah. Su foto aparece sobre el epígrafe "Debe tomarse incluso la sangre de un feliz cruzado vendiendo flores a los paseantes". El florista afirma no estar asustado.

Comentarios

Geryon

La de cabras que va a dejar viudas el garrulo este...