El país asiático exporta el 90% de la decoración navideña mundial. Cada año, no sólo los cristianos celebran la llegada de la Navidad, también miles de trabajadores inmigrantes que acuden todos los días a las fábricas del sur de China para alimentar esta industria en auge. Durante las últimas dos décadas, varios pueblos pequeños en las provincias de Guangdong, Zhejiang y Jiangsu han pasado de la pobreza a la riqueza, todo gracias a Papá Noel.
De todas maneras ya no es por los salarios bajos, sino por la alta automatización de los procesos. Todo está muy robotizado, lo que evita también riesgos de errores humanos.
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De todas maneras ya no es por los salarios bajos, sino por la alta automatización de los procesos. Todo está muy robotizado, lo que evita también riesgos de errores humanos.