Hace 7 años | Por FedericoFD a eldiario.es
Publicado hace 7 años por FedericoFD a eldiario.es

El Partido Popular gana el Gobierno pero paga un precio altísimo: dejar malherido el bipartidismo. La estabilidad del sistema político de 1978 no derivaba de la unanimidad, sino de que la alternancia entre PP y PSOE construyera identidades políticas (en términos generales "izquierda-derecha" y quienes se ubicaban a sus respectivos márgenes) en torno a fuerzas que se pusieran de acuerdo en las grandes cuestiones pero discutieran enardecidamente en torno a sus concreciones.