Miremos el asunto con un poco de perspectiva. Veamos: Bill Clinton hace un discurso en el que defiende exactamente lo mismo que Trump (aquí lo tienen, no hace falta que me crean) sobre la inmigración, y recibe una ovación unánime. La prensa no tiene queja alguna, nada que ver aquí, sigan circulando. Obama veta la entrada de iraquíes -recuerden, primero bombardeados por los americanos y luego sus presuntos aliados- durante seis meses, el doble que lo previsto en la moratoria de Trump. ¿Reacción? Absoluto silencio. Todo correcto.
Comentarios
Falsos equidistantes.
"No defiendo el veto. Ni lo ataco. Dudo de su eficacia en la lucha contra el terrorismo islámico, pero..."
#2 Yo he leído todo el artículo, pero..... no tengo otra cosa que criticar más que una supuesta falsa equidistancia.
#4 Tú más, siempre.
Por cansino.
No defiendo el veto. Ni lo ataco.
Eso sí, a la hora de retuitear a Pío Moa diciendo El gaymonio solo puede ser una parodia. Y la adopción de niños por parejas homosexuales un atentado contra los derechos de la infancia no tiene tantas dudas.
Católica estándar...