Hace 6 meses | Por chisqueiro a theguardian.com
Publicado hace 6 meses por chisqueiro a theguardian.com

El resultado, según Deaton, es una forma depredadora de capitalismo en Estados Unidos que enriquece a las corporaciones y a los ricos a expensas de los trabajadores, profundiza la desigualdad de riqueza y oportunidades, y, aunque muchos estadounidenses lo negarán, alimenta el surgimiento de un sistema de clases. Mientras desmonta el sistema, Deaton se centra en las evidentes absurdidades de las afirmaciones sobre la pureza del mercado. "Si necesitas una ambulancia, no estás en la mejor posición para encontrar el mejor servicio o negociar precio

Comentarios

pkreuzt

Una forma depredadora de capitalismo en Estados Unidos que enriquece a las corporaciones y a los ricos a expensas de los trabajadores

O sea, lo que toda la vida hemos llamado capitalismo.

RoterHahn

Deaton dijo que lo que ha surgido de décadas de un sistema que favorece a aquellos con educación universitaria es una forma de sistema de clases, aunque a los estadounidenses no les gusta hablar de ello en esos términos.

B

¿Lucha contra la pobreza? Con tal expresión se está implicando claramente que la pobreza es algo malo o negativo, pues nadie lucharía contra algo que considerase bueno.

Y esa implicación de que la pobreza es algo malo o negativo es profundamente aporófoba y ofensiva, pues deja en mal lugar a las personas, éticas e inteligentes, que, en legítimo ejercicio de sus derechos, consideran que la pobreza es una circunstancia tan estupenda como para incluso hacer nacer, y criar, a sus propios hijos en ella, a que sus hijos también les agradezcan la pobreza tanto como esas personas progenitoras a su vez agradecen la pobreza a sus padres.

Tan respetable es la persona que no quiere hacer nacer a sus hijos en la pobreza porque está mejor no viendo a sus hijos sufrir la pobreza, como la persona que considera estupendo hacer nacer a sus hijos en la pobreza porque elige considerar que la pobreza es estupenda, o porque quiere pensiones o tiene intereses personales que considere más importantes que el bienestar de sus hijos. Que tú o yo consideremos que la pobreza es horrible para los hijos no quita el derecho a otras personas de considerar lo contrario. Si una persona considera que la pobreza es estupenda y quiere que haya más gente en ella y por eso hace nacer a sus hijos en la pobreza, está en su derecho y no es asunto nuestro.

Y es que el libro de los gustos está en blanco y la convivencia en una sociedad civilizada debe consistir en que sepamos respetarnos los unos a los otros las costumbres, culturas, preferencias económicas, criterios progenitores y principios éticos de cada cual, aunque puedan ser muy diferentes a los nuestros.

El que es pobre es porque quiere votar capitalismo y pobreza, con sus votos y con su prole.

Así que no permitáis que estas noticias aporófobas desvíen vuestra atención y vuestra ética: no renunciéis a pegaros el gustazo de generar otro baby boom para hacer nacer a vuestra prole en la pobreza o la precariedad. Porque la natalidad y las pensiones lo necesitan, y porque aunque en un primer momento quizá podría pareceros mal hacer nacer a vuestra propia prole en la pobreza o en la precariedad, cuando vuestra prole alcance la mayoría de edad también se volverá defensora del derecho de hacer nacer a su propia prole en la pobreza o la precariedad, a que estos hijos suyos (vuestros nietos) les agradezcan la pobreza, la precariedad, el subdesarrollo, el capitalismo y la monarquía, en forma de pensiones, tanto como vuestra prole os los agradecerán a vosotros, en forma de pensiones, y tanto como vosotros los agradecéis a vuestros padres, en la misma forma. Así que no hay ningún problema con que hagáis nacer a vuestra prole en la pobreza, en la precariedad, en el subdesarrollo, en el capitalismo y en la monarquía, porque vuestra prole os lo agradecerá, en forma de pensiones.