La propia historia de cómo se llevo a cabo la restauración es tan fascinante como la del propio Bonaparte. El británico Kevin Brownlow, siendo todavía un estudiante, estaba un día husmeando en la biblioteca entre bovinas de películas francesas. Ahí los responsables le prestaron una que incluía metraje sobre Napoleón y la revolución francesa, por lo que asumió que se trataría de un film educativo cualquiera. Se lo puso igualmente, sin saber que lo que iba a ver era una de las películas más épicas posibles
Comentarios
"...bovinas de películas...", ¿películas de vacas? (seguramente zoófilas)
#3 #1 y a mí se me ha escapado
#5 En el artículo tienen una errata, de las cinco veces que lo escriben en una mal, bobinas.
Lo de "bovinas" me ha matao.... Mis hogos!!!
En Espinof no tienen un simple corrector de estilo?
#3 Querrás decir ortográfico. Y aunque lo tenga, con las palabras homónimas lo llevan crudo los ordenadores sin IA.
No voy a ver una película que dura 5 horas ni por fascículos. Tampoco de tres. Hora y media es lo normal.
#2 En mi opinión diría que a día de hoy lo más habitual ronda las dos horas.
#2 Yo la ví, con orquesta tocando en directo como en su época. Y sobreviví