Las estrellas fugaces son un fenómeno conocido desde la antigüedad, y siempre han sido consideradas como un acontecimiento muy peculiar. Quizá debido a su baja frecuencia y dificultad de observación, tradicionalmente se han asociado a la «buena suerte» como gran parte de sucesos poco frecuentes. Otros autores consideran que en algunos momentos se les otorgó cierta sobrenaturalidad, de tal forma que pedirles un deseo sería algo parecido a rezarle a un ser divino.
Comentarios
#3 Empiezo a entender tu presunta asexualidad (aunque estoy convencido de que te matas a pajas). Eres un misógino. Tu comentario lo es.
Yo empecé a sospecharlo cuando no se cumplió mi deseo de tirarme a la vecina del cuarto.
#1 Como yo soy asexual me la suda las vecinas, pero pagando seguramente te la podrás tirar, solamente debes saber cual es el auténtico precio para no tener que pagar más de la cuenta. Unas te costarán miles de euros y otras un céntimo de euro o menos, pero todas las vecinas tienen un precio. Si quieres tirarte a tu vecina entonces menos estrellas fugaces y más echar mano de la cuenta corriente.
Quizá alguien pidió que no se cumplieran los deseos de los demás que pedían deseos a estrellas fugaces.