Alguno se dirá: "¿A qué viene hablar a estas alturas del asesinato de César, si esa historia ya nos la sabemos?" Pero yo le diría: "¿Seguroooo...?" "Sí, claro, lo mataron en el senado en los idus de marzo, y su hijo Bruto formaba parte del complot". En ese caso, recomendaría al lector que siguiera leyendo porque la cosa fue un poco más compleja, y los conjurados eran bastantes más de los que el personal suele imaginar. Así pues, vamos al grano.
El artículo no es gran cosa, mostrando que los conocimientos del autor sobre la sociedad romana son meramente superficiales. Ejemplo:
Aparte de eso, tuvieron lugar bastantes prodigios de mal augurio que, para un pueblo tan supersticioso como los romanos, bastarían para poner en guardia al más pintado. Y para colmo, un conocido augur por nombre Spurinna le previno durante la celebración de un sacrificio con la famosa advertencia: "Guárdate de los idus de marzo".
Este es un tópico como una casa, dándose a entender que los augures actuaban como adivinos, cuando no se parecían remotamente pues la naturaleza de los augurios no intentaba, realmente, predecir el futuro. Ciertamente, se practicaban multitud de sacrificios y se tomaba nota minuciosamente de cualquier prodigios, como mulas poniéndose de parto y cosas así; cualquier lector familiarizado con la obra de Tito Livio se da cuenta rápidamente de como su autor se afanó en detallar cualquier tipo de prodigio que tenía lugar durante el transcurso de cada año consular.
Pero lo relevante era que las interpretaciones premonitorias de los augurios recogidos sólo se elaboraban a posteriori del hecho ocurrido. Así, si se hacía un augurio abriéndole las entrañas de un pollo, se tomaba nota de cuál era la disposición de las entrañas, su color, etcétera pero no se relacionaba con ningún hecho en sí; sólo si la matrona Marcia - por decir un nombre- se torcía un tobillo al cabo de una semana, entonces el augur relacionaba el augurio con el hecho acaecido, pues el dogma religioso indicaba que todo suceso debía ir precedido de algún tipo de augurio.
#3 Por cierto, sobre el augurio de Espurina según la Vita de Suetonio dedicada a Cayo Julio César (LXXXI.2):
Mientras él hacia un sacrificio le aconsejó también que se guardara de un peligro que no se aplazaría más allá de los idus de marzo. Como puede observarse, la práctica de estos sacrificios no era nada extraordinario, pues luego el mismo día del asesinato practicó más sacrificios y estos no le daban "presagios favorables, entró en la curia [donde lo asesinaron] despreciando el escrúpulo religioso" (LXXXI.4); es decir, se trata de una interpretación a posteriori de una práctica que no tenía nada de extraordinaria.
Comentarios
Me alegro que "Amo del Castillo" vuelva a tener ordenador!
Muy digna entrada-resumen de "la cosa": http://media.happyblog.it/c/ces/cesare.jpg
El artículo no es gran cosa, mostrando que los conocimientos del autor sobre la sociedad romana son meramente superficiales. Ejemplo:
Aparte de eso, tuvieron lugar bastantes prodigios de mal augurio que, para un pueblo tan supersticioso como los romanos, bastarían para poner en guardia al más pintado. Y para colmo, un conocido augur por nombre Spurinna le previno durante la celebración de un sacrificio con la famosa advertencia: "Guárdate de los idus de marzo".
Este es un tópico como una casa, dándose a entender que los augures actuaban como adivinos, cuando no se parecían remotamente pues la naturaleza de los augurios no intentaba, realmente, predecir el futuro. Ciertamente, se practicaban multitud de sacrificios y se tomaba nota minuciosamente de cualquier prodigios, como mulas poniéndose de parto y cosas así; cualquier lector familiarizado con la obra de Tito Livio se da cuenta rápidamente de como su autor se afanó en detallar cualquier tipo de prodigio que tenía lugar durante el transcurso de cada año consular.
Pero lo relevante era que las interpretaciones premonitorias de los augurios recogidos sólo se elaboraban a posteriori del hecho ocurrido. Así, si se hacía un augurio abriéndole las entrañas de un pollo, se tomaba nota de cuál era la disposición de las entrañas, su color, etcétera pero no se relacionaba con ningún hecho en sí; sólo si la matrona Marcia - por decir un nombre- se torcía un tobillo al cabo de una semana, entonces el augur relacionaba el augurio con el hecho acaecido, pues el dogma religioso indicaba que todo suceso debía ir precedido de algún tipo de augurio.
cc/ #1
#3 la casta de los augures curiles (de memoria) sí que era una casta y los demás son tonterías
#3 Por cierto, sobre el augurio de Espurina según la Vita de Suetonio dedicada a Cayo Julio César (LXXXI.2):
Mientras él hacia un sacrificio le aconsejó también que se guardara de un peligro que no se aplazaría más allá de los idus de marzo. Como puede observarse, la práctica de estos sacrificios no era nada extraordinario, pues luego el mismo día del asesinato practicó más sacrificios y estos no le daban "presagios favorables, entró en la curia [donde lo asesinaron] despreciando el escrúpulo religioso" (LXXXI.4); es decir, se trata de una interpretación a posteriori de una práctica que no tenía nada de extraordinaria.
¿Lo de "Gaio" en vez de Cayo o Gaius es por alusiones a Nicomedes de Bitinia?