Si estás cansado de recomendar el uso de navegadores alternativos a familiares y amigos que delegan en ti "el correcto funcionamiento de su equipo", si te has hartado con la vulnerabilidad de los LNK, o si directamente no te gusta Internet Explorer, puedes bloquear su acceso a Internet y evitar que se utilice para navegar. Se puede tanto evitar que sea ejecutado por el usuario como que acceda a Internet, mediante la configuración de un proxy falso y evitando que éste pueda ser cambiado o eliminado.
Comentarios
No creo yo que putear al usuario sea la mejor forma de convencerlo de nada...
#1 Pues depende, teniendo en cuenta que hay muchas páginas corporativas, o incluso de administraciones, que te exigen IE para navegar por ellas correctamente...