Con sinceridad, y como no no-gallego y no-español, me parece una estupidez. Lo mismo para el conseguido .cat para Cataluña. Se nota que los gallegos tienen la vida resuelta para estar preocupandose por si tienen o no un dominio de primer nivel.
Que yo sepa, la función originaria de los dominios no era "crear espacios para la cultura y la lengua", y aunque así fuese, existen muchos grupos humanos, más representativos que gallegos y catalanes, que merecen un dominio propio. Hace dos meses, los galeses (esos ingleses que hablan muuuu raro) tambien exigieron un dominio propio (.cym, de Cymru que es como se autodenominan) y entonces me pregunto ¿No tienen el mismo derecho los gitanos a un .rom, que son más numerosos que gallegos, galeses y catalanes juntos y, de paso, conservan una unidad cultural mayor estando más dispersos?
¿O es que solo los grupos económicamente fuertes pueden tener esa clase de "presencia"? ¿No estaran, gallegos y galeses, apoyando a un grupo de empresarios que ya tienen montado el quiosco desde que el comenzarán a ver los .gal y .cym a precio de oro, mientras le pagan a la ICANN una fracción de su precio?
Pero, esa es solo mi opinión. E insensateces peores he visto... Mejor que se preocupen por eso que por tener trabajo, casa y un mundo para sus hijos, que eso cansa mucho.
#2 "existen muchos grupos humanos, más representativos que gallegos y catalanes, que merecen un dominio propio"
Ok, entonces nunca hagamos nada.
a) Hay una asociación que quiere crear el .gal, están en su derecho de intentarlo, no?
b) Perjudica a alguien la creación del .gal?
c) El ICANN se encarga de juzgar si un dominio debe crearse o no.
Estoy de acuerdo con ctovar, yo si que soy gallego, pero como dices, los dominios nunca han tenido "ese" fin. Hay cosas mucho más importantes, para defender la cultura se pueden hacer muchos sitios web bajo un .edu, un .com, un .es... Como siempre, en este pais se pierde tanto tiempo discutiendo por detalles que arreglando las cosas, o poniendo un granito de arena.
Comentarios
Estaría bien hombre, psoe.gal
La página de la asociación aún no va, pero es ésta: http://puntogal.org/
Con sinceridad, y como no no-gallego y no-español, me parece una estupidez. Lo mismo para el conseguido .cat para Cataluña. Se nota que los gallegos tienen la vida resuelta para estar preocupandose por si tienen o no un dominio de primer nivel.
Que yo sepa, la función originaria de los dominios no era "crear espacios para la cultura y la lengua", y aunque así fuese, existen muchos grupos humanos, más representativos que gallegos y catalanes, que merecen un dominio propio. Hace dos meses, los galeses (esos ingleses que hablan muuuu raro) tambien exigieron un dominio propio (.cym, de Cymru que es como se autodenominan) y entonces me pregunto ¿No tienen el mismo derecho los gitanos a un .rom, que son más numerosos que gallegos, galeses y catalanes juntos y, de paso, conservan una unidad cultural mayor estando más dispersos?
¿O es que solo los grupos económicamente fuertes pueden tener esa clase de "presencia"? ¿No estaran, gallegos y galeses, apoyando a un grupo de empresarios que ya tienen montado el quiosco desde que el comenzarán a ver los .gal y .cym a precio de oro, mientras le pagan a la ICANN una fracción de su precio?
Pero, esa es solo mi opinión. E insensateces peores he visto... Mejor que se preocupen por eso que por tener trabajo, casa y un mundo para sus hijos, que eso cansa mucho.
#2 "existen muchos grupos humanos, más representativos que gallegos y catalanes, que merecen un dominio propio"
Ok, entonces nunca hagamos nada.
a) Hay una asociación que quiere crear el .gal, están en su derecho de intentarlo, no?
b) Perjudica a alguien la creación del .gal?
c) El ICANN se encarga de juzgar si un dominio debe crearse o no.
Estoy de acuerdo con ctovar, yo si que soy gallego, pero como dices, los dominios nunca han tenido "ese" fin. Hay cosas mucho más importantes, para defender la cultura se pueden hacer muchos sitios web bajo un .edu, un .com, un .es... Como siempre, en este pais se pierde tanto tiempo discutiendo por detalles que arreglando las cosas, o poniendo un granito de arena.