Es un coletazo más de la recesión económica. A pesar de que cada vez hay más ancianos en España, las bajas en los geriátricos se están multiplicando. ¿El motivo? No hay dinero para mantenerlos en un centro que les dé de comer, de dormir y los entretenga diariamente. Cada vez son más las familias que han decidido ahorrarse los hasta 2.000 euros que pueden llegar a pagar por una estancia
La vergüenza es que se hayan ido cargando sistemáticamente los centros públicos para favorecer los centros privados que sangran a las familias (porque la pensión que recibe el anciano raramente cubre la estancia)
El neolibegalismo que dicen unos o los mercados como los llaman los otros. Tal para cual.
#3 Las residencias y los ancianos, otro lucroso negocio en el que donde todas las administraciones han pasado de puntillas para no cambiar nada, más bien dejarlo empeorar para que rindieran aún más aprovechando el deterioro de los ciudadanos.
Bueno, la verdad es que lo único que han cambiado para bien todas las administraciones son los chalets de sus integrantes. De todo lo demás ahora vemos que las grandes mejoras, pagadas muchas a un precio cien veces mayor de lo que realmente valen y que además acabarán en manos privadas, han sido más una ilusión que una realidad.
Comentarios
Relacionada:El lado oscuro de la soledad
El lado oscuro de la soledad
elpais.comLa vergüenza es que se hayan ido cargando sistemáticamente los centros públicos para favorecer los centros privados que sangran a las familias (porque la pensión que recibe el anciano raramente cubre la estancia)
El neolibegalismo que dicen unos o los mercados como los llaman los otros. Tal para cual.
#3 Las residencias y los ancianos, otro lucroso negocio en el que donde todas las administraciones han pasado de puntillas para no cambiar nada, más bien dejarlo empeorar para que rindieran aún más aprovechando el deterioro de los ciudadanos.
Bueno, la verdad es que lo único que han cambiado para bien todas las administraciones son los chalets de sus integrantes. De todo lo demás ahora vemos que las grandes mejoras, pagadas muchas a un precio cien veces mayor de lo que realmente valen y que además acabarán en manos privadas, han sido más una ilusión que una realidad.
Familias con mas integrantes en paro que se quedan en casa y que ahora tiempo de cuidar a los abuelos.