Las ventas de los bazares orientales han descendido un 50%. Cada día entran en el puerto de Barcelona menos contenedores chinos. Las empresas de importación se ahogan. El tinglado de las falsificaciones se derrumba y la crisis está poniendo en jaque los principales negocios de los chinos de Catalunya.
Es obvio que la crisis no sabe idiomas...no obstante muchos chinos ya se han alejado de la imagen restaurante cutre (ahora son WOK Teppanyaki...) y del "todo a 100"... ahora empiezan a regentar bares- además muy bien- y otros negocios. Bienvenidos mientras coticen y no hagan economía sumergida...
Comentarios
Es obvio que la crisis no sabe idiomas...no obstante muchos chinos ya se han alejado de la imagen restaurante cutre (ahora son WOK Teppanyaki...) y del "todo a 100"... ahora empiezan a regentar bares- además muy bien- y otros negocios. Bienvenidos mientras coticen y no hagan economía sumergida...
#1
Pues como todo el mundo. Tampoco es que sean precisamente solo los chinos los que trabajan en B en este país.
#3 No, por supuesto.
Lo que contradice esta otra noticia que apareció hace unos días por aquí http://www.elmundo.es/elmundo/2010/01/13/videos/1263404943.html