Ante las avanzadillas de la privatización sanitaria de algunas comunidades, cada día se plantean más cuestiones sobre su viabilidad ética y moral. Pero en cuanto al plano económico, ¿es realmente sostenible un modelo sanitario así?
Los que defienden la sanidad privada siempre ponen de escusa que realizan los servicios y aun asi ganan dinero, con lo que la gestión es más eficiente. Pero la cuestión es, ¿acaso la gestión pública es incapaz de realizar la misma gestión que la privada?. Conocimientos no le faltan, ya sea en el entorno sanitario o universitario, solo es cuestión de aplicarse adecuadamente y sin excusas. ¿Porqué pagar beneficios a bolsillos privados cuando esos beneficios deberían ser destinados a mejorar la calidad de vida de los enfermos y la investigación?. Como dijo Noam Chomsky, "existe una gran diferencia entre la gestión pública y la privada, la gestión privada busca maximizar el beneficio de dueños y accionistas, y la gestión pública busca maximizar el servicio". Se puede maximizar el servicio perfeccionando la gestión de gastos, dar la excusa de la gestión privada para favorecer a "amiguitos ricos" es manipular. Y se conseguirá privatizar si la gente se comporta como hasta ahora, pasivamente y sin actuar.
Bueno, es un tema controvertido.
La sanidad publica tiene unas ventajas y la privada tiene otras... yo personalmente apuesto por la públicada, por temas de igualdad simplemente, pero entiendo ambas posturas.
Bajo mi punto de vista, la sanidad española tiene varios problemas:
1.- Autonomías: el dinero pasa por más manos y se pierde una parte en el camino.
2.- No valoramos el coste del servicio. Por eso colapsamos urgencias por dolencias leves en vez de ir al médico de cabecera o tenemos el ejército de viejecitos que sólo faltan al ambulatorio cuando se ponen malos.
3.- Agresiones demasiado frecuente al personal sanitario.
Privatizar la sanidad es hacer negocio con las desgracias de las personas. Si ya no tuviesemos suficiente. Y por otra parte, también estoy de acuerdo con el tema de los melocotones y limones.
Si tengo una salud buena (soy un melocotón), y hay otro que no se cuida (limón): ¿Por qué tengo que pagarle los gastos de sanidad a alguien que la precisa por no cuidarse? Otra cosa es que por casualidades del destino, tengas un accidente, que eso le puede pasar a cualquiera. Está claro que ni un extremo ni el otro son los mejores.
Cuando en un hospital público "externalizan" un servicio determinado, eso quire decir que dicho trabajo dejan de realizarlo funcionarios para ser encargado a una empresa privada. Desconozco lo que le pagan a la empresa, suponemos que menos de lo que costaba el salariod e lso funcionarios, pero aunque costase lo mismo, hay que tener en cuenta que la empresa obtiene beneficios, así que ya os podéis imaginar de dónde sale el ahorro de dinero: sí, de los sueldos de los trabajadores, que cobran menos que los antiguos funcionarios por realizar el mismo trabajo (o más, ya que hacen más horas).
El resultado... bueno, pues el de siempre: reducción del sueldo de los trabajadores y engorde de los beneficios de las empresas. ¿os suena, verdad?
Comentarios
La economia de la sanidad privada está bollante,sino no existiria......la de la pública,no se debe medir como si fueran patatas.....
Los que defienden la sanidad privada siempre ponen de escusa que realizan los servicios y aun asi ganan dinero, con lo que la gestión es más eficiente. Pero la cuestión es, ¿acaso la gestión pública es incapaz de realizar la misma gestión que la privada?. Conocimientos no le faltan, ya sea en el entorno sanitario o universitario, solo es cuestión de aplicarse adecuadamente y sin excusas. ¿Porqué pagar beneficios a bolsillos privados cuando esos beneficios deberían ser destinados a mejorar la calidad de vida de los enfermos y la investigación?. Como dijo Noam Chomsky, "existe una gran diferencia entre la gestión pública y la privada, la gestión privada busca maximizar el beneficio de dueños y accionistas, y la gestión pública busca maximizar el servicio". Se puede maximizar el servicio perfeccionando la gestión de gastos, dar la excusa de la gestión privada para favorecer a "amiguitos ricos" es manipular. Y se conseguirá privatizar si la gente se comporta como hasta ahora, pasivamente y sin actuar.
Acabaremos como en Estados Unidos, teniendo que pagar
Bueno, es un tema controvertido.
La sanidad publica tiene unas ventajas y la privada tiene otras... yo personalmente apuesto por la públicada, por temas de igualdad simplemente, pero entiendo ambas posturas.
Bajo mi punto de vista, la sanidad española tiene varios problemas:
1.- Autonomías: el dinero pasa por más manos y se pierde una parte en el camino.
2.- No valoramos el coste del servicio. Por eso colapsamos urgencias por dolencias leves en vez de ir al médico de cabecera o tenemos el ejército de viejecitos que sólo faltan al ambulatorio cuando se ponen malos.
3.- Agresiones demasiado frecuente al personal sanitario.
Privatizar la sanidad es hacer negocio con las desgracias de las personas. Si ya no tuviesemos suficiente. Y por otra parte, también estoy de acuerdo con el tema de los melocotones y limones.
Si tengo una salud buena (soy un melocotón), y hay otro que no se cuida (limón): ¿Por qué tengo que pagarle los gastos de sanidad a alguien que la precisa por no cuidarse? Otra cosa es que por casualidades del destino, tengas un accidente, que eso le puede pasar a cualquiera. Está claro que ni un extremo ni el otro son los mejores.
Pública, sin duda.
Cuando en un hospital público "externalizan" un servicio determinado, eso quire decir que dicho trabajo dejan de realizarlo funcionarios para ser encargado a una empresa privada. Desconozco lo que le pagan a la empresa, suponemos que menos de lo que costaba el salariod e lso funcionarios, pero aunque costase lo mismo, hay que tener en cuenta que la empresa obtiene beneficios, así que ya os podéis imaginar de dónde sale el ahorro de dinero: sí, de los sueldos de los trabajadores, que cobran menos que los antiguos funcionarios por realizar el mismo trabajo (o más, ya que hacen más horas).
El resultado... bueno, pues el de siempre: reducción del sueldo de los trabajadores y engorde de los beneficios de las empresas. ¿os suena, verdad?