Los cursos gratuitos que imparten estamentos públicos y otros (como cajas de ahorro por ejemplo) muchas veces con ayudas técnicas e incluso económicas por parte de empresas de software de código oculto se están impartiendo con programas como Photosoft, la saga Office u otros de precios prohibitivos para las personas a los que van dirigidos. Alguien podrá decir que estos cursos suelen ser de reciclaje para personas en paro o con trabajo y que hay que aprender con el programa con el que se va a trabajar.
Comentarios
En la práctica para pocos programas de uso doméstico se compra licencia, pero sí casi la totalidad del utilizado profesionalmente.
Esto conviene incluso a los desarrolladores de software privativo, si la gente usa en casa su software pirateado, será el mismo que se use después en oficinas y ya pagando.
Dame Photoshop o dame GIMP. No, mejor que GIMP dame la muette.
Claro que hay que aprender el programa con el que vas a trabajar. Pero eso es exactamente igual con software libre que privativo.
Incluso con software libre hay una ventaja: te lo puedes llevara casa para aprender. Con el privativo deberías pagar una licencia para poder hacerlo.
Es fácil si tantos problemas creen que produce el copyright estricto, que lo hagan desaparecer y ya está. Es que algunos están tan ensimismados que se creen dioses por hacer una canción o un programa.
Salu2