El socialista Aquilino Valencia seguirá como alcalde de Calvos de Randín (Ourense) después de que ayer fracasara la moción de censura que presentaron cuatro ediles tránsfugas del Partido Popular y otro del PSOE, al impedirles la entrada al Ayuntamiento las más de 250 personas que se habían atrincherado en el interior. El candidato frustrado a alcalde sólo quería ser el regidor tres años y después "marcharse del pueblo".
Comentarios
Voto provocación porque 250 personas no tienen derecho a romper el funcionamiento de un órgano de electos democraticamente. Ese no es el camino.