el otro día en la radio cuando entrevistaban a Dña. Ana Mato (Nº3 del PP por Madrid) decía que en una entrevista anterior le preguntaron si estaba en ese puesto por la obligación legal que tienen los partidos, a lo que ella contestó muy seria (como no podía ser de otra forma ante una pregunta de ese estilo) que ese puesto es el fruto de veinte años de servicio y esfuerzo por el Partido. No puede estar más en lo cierto la Sra. Mato. SÍ SEÑOR!
Para hacer leyes de discriminación "positiva" todo se apoya en estadísticas, mi pregunta es:
¿Estadísticas en general? a mi me gustara ver esas mismas estadísticas que respaldan estas iniciativas pero hasta la edad de 30 años. Es decir, desde que estamos en democracia, quizás no sean tan fuertes las diferencias como para tomar esas iniciativas, quizás esas diferencias sean de un 60% a 40% que es lo que busca le ley.
Yo veo a mi alrededor que la gente de esa edad y más jóvenes son tratados con absoluta igualdad, para mi esas políticas tendrían que estar orientadas a gente de los 40 en adelante. Quizá estemos tratando de compensar un problema pasado actuando sobre el presente y claro eso es imposible y además genera un problema de desigualdad en un futuro. No sé si me explico.
Este artículo toca un tema un par de temas un tanto delicados, por un lado la discriminación positiva, que parece llevar unos años de moda... y por otro lado la mujer en el mundo laboral. Vayamos por partes:
Si lo pensamos bien la discrminación positiva es algo un tanto absurda, estoy de acuerdo con #2, el tratar de compensar los errores del pasado con esta inciativa no va a hacer que el pasado cambie, ni creo que a todos y todas aquellas personas que sufrieron dicha discriminación les importe mucho que ahora, 20 ó 30 años después, gente que ni tal vez sea de su entorno, disfrute de beneficios porque ellos o ellas sufrieron. Esto es una balanza, en cuanto empecemos a echar más peso en un lado, el otro se verá trastocado, debería de buscarse el equilibrio.
Respecto a la mujer en el mundo laboral, coincido en que, por desgracia, nos encontramos en un mundo machista, y , en vez de machista, debería de decir intolerante, pues no creo que a día de hoy, siga siendo el sexo el único de los motivos de discrimnación. Tampoco voy a negar que la sociedad tiende a la igualdad, pese a que siga habiendo sectores que no avanzan, pero como todo tipo de transición, esto será lento pero constante.
Personalmente creo que el problema no radica en que sea un hombre o una mujer el que ocupue un puesto u otro, es más bien un problema de envidia. Normalmente (me incluyo a mi mismo) cuando algo nos supera, nos cuesta fijarnos en sus virtudes, y tendemos a devaluarlo sacándole defectos. No nos fijamos en todo lo que podemos aprender, más bien buscamos argumentos para convecernos y convencer a nuestro entorno de que nuestra idea, valía, etc... es superior.
Con esto quiero llegar a que no será la primera ni la última vez que como defecto se emplee el sexo de una persona, pero seguramente haya habido comentarios más absurdos en nuestra vida, el típico "Es un pringado", "No sabe hacer tal..." son simplemente maneras de desmerecer a alguien.
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Para hacer leyes de discriminación "positiva" todo se apoya en estadísticas, mi pregunta es:
¿Estadísticas en general? a mi me gustara ver esas mismas estadísticas que respaldan estas iniciativas pero hasta la edad de 30 años. Es decir, desde que estamos en democracia, quizás no sean tan fuertes las diferencias como para tomar esas iniciativas, quizás esas diferencias sean de un 60% a 40% que es lo que busca le ley.
Yo veo a mi alrededor que la gente de esa edad y más jóvenes son tratados con absoluta igualdad, para mi esas políticas tendrían que estar orientadas a gente de los 40 en adelante. Quizá estemos tratando de compensar un problema pasado actuando sobre el presente y claro eso es imposible y además genera un problema de desigualdad en un futuro. No sé si me explico.
muchas veces combatimos el machismo con feminismo, y con eso ya nos quedamos tranquilos
Este artículo toca un tema un par de temas un tanto delicados, por un lado la discriminación positiva, que parece llevar unos años de moda... y por otro lado la mujer en el mundo laboral. Vayamos por partes:
Si lo pensamos bien la discrminación positiva es algo un tanto absurda, estoy de acuerdo con #2, el tratar de compensar los errores del pasado con esta inciativa no va a hacer que el pasado cambie, ni creo que a todos y todas aquellas personas que sufrieron dicha discriminación les importe mucho que ahora, 20 ó 30 años después, gente que ni tal vez sea de su entorno, disfrute de beneficios porque ellos o ellas sufrieron. Esto es una balanza, en cuanto empecemos a echar más peso en un lado, el otro se verá trastocado, debería de buscarse el equilibrio.
Respecto a la mujer en el mundo laboral, coincido en que, por desgracia, nos encontramos en un mundo machista, y , en vez de machista, debería de decir intolerante, pues no creo que a día de hoy, siga siendo el sexo el único de los motivos de discrimnación. Tampoco voy a negar que la sociedad tiende a la igualdad, pese a que siga habiendo sectores que no avanzan, pero como todo tipo de transición, esto será lento pero constante.
Personalmente creo que el problema no radica en que sea un hombre o una mujer el que ocupue un puesto u otro, es más bien un problema de envidia. Normalmente (me incluyo a mi mismo) cuando algo nos supera, nos cuesta fijarnos en sus virtudes, y tendemos a devaluarlo sacándole defectos. No nos fijamos en todo lo que podemos aprender, más bien buscamos argumentos para convecernos y convencer a nuestro entorno de que nuestra idea, valía, etc... es superior.
Con esto quiero llegar a que no será la primera ni la última vez que como defecto se emplee el sexo de una persona, pero seguramente haya habido comentarios más absurdos en nuestra vida, el típico "Es un pringado", "No sabe hacer tal..." son simplemente maneras de desmerecer a alguien.