Hace 14 años | Por --160495-- a libertaddigital.com
Publicado hace 14 años por --160495-- a libertaddigital.com

Hace tiempo que no hablamos de la parte más expresiva del idioma: el gatuperio de los vituperios. El capítulo de los insultos se mezcla con el de los tacos. El intríngulis está en que, por definición, la palabra soez no debe pronunciarse, pero esa misma prohibición proporciona un desahogo extraordinario cuando esa palabra se emite. Una salida del laberinto es inventarse nuevas interjecciones que parezcan maldiciones pero que no lo son.

Comentarios

starwars_attacks

sí: son...palabras reservadas diría yo.

por cierto, ayer ví por ahí una web dedicada al día de la blasfemia. Quizás interese en este contexto.

D

hijo de puta hay que decirlo mas, hijo de puta mas