Los dos inmigrantes hace mas de tres años que viven en Vic, son psicoterapeutas, tienen contrato de trabajo, viven en un piso alquilado a su nombre, han ido a cursos de catalán y el gobierno venezolano les ha mandado el certificado de penales necesario para obtener el certificado de residencia (traducción completa en #1)
El juez ha suspendido la orden de expulsión y ha dejado en libertad dos inmigrantes venezolanos que la Policía Nacional fue a buscar a su casa cuatro días antes de la fecha en que debían acudir al Ayuntamiento de Vic para presentar los papeles que acreditan su arraigo en España.
Segun ha informado a Efe el abogado Enrique Leiva, el acta del juez argumenta que està acreditado el arraigo de los dos inmigrantes en España y que la expulsión de los mismos ocasionaria un juicio excesivo y que cuando los detuvieron el único tramite que les faltaba era el certificado del Ayuntamiento. La pareja, está viviendo una pesadilla durante los últimos meses e incluso fueron llevados al Centro de Internamiento de Inmigrantes de Barcelona, donde estuvieron presos 14 días hasta que el juez los puso en libertad.
La pesadilla empezó cuando el mes de abril pasado, los inmigrantes firmaron un contrato de alquiler a su nombre acreditando su pasaporte venezolano. Poco después recibieron una notificación del Cuerpo Nacional de Policía donde se les requeria que acudieran a comisaria por un "asunto de su interés" según el abogado.
Una vez en comisaría, se les pidió documentación y al no tener permiso de residencia, se les puso en propuesta de expulsión. Cuando la propuesta de explusión fue aprobada por la subdelegación del gobierno, los dos inmigrantes no la recorrieron, sino que aceleraron los tramites de regularización, convencidos que podrían demostrar fácilmente su arraigo, pero a pesar de todo, el 20 de Abril unos agentes de la policia nacional se presentaron en su domicilio a detenerles.
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El juez ha suspendido la orden de expulsión y ha dejado en libertad dos inmigrantes venezolanos que la Policía Nacional fue a buscar a su casa cuatro días antes de la fecha en que debían acudir al Ayuntamiento de Vic para presentar los papeles que acreditan su arraigo en España.
Segun ha informado a Efe el abogado Enrique Leiva, el acta del juez argumenta que està acreditado el arraigo de los dos inmigrantes en España y que la expulsión de los mismos ocasionaria un juicio excesivo y que cuando los detuvieron el único tramite que les faltaba era el certificado del Ayuntamiento. La pareja, está viviendo una pesadilla durante los últimos meses e incluso fueron llevados al Centro de Internamiento de Inmigrantes de Barcelona, donde estuvieron presos 14 días hasta que el juez los puso en libertad.
La pesadilla empezó cuando el mes de abril pasado, los inmigrantes firmaron un contrato de alquiler a su nombre acreditando su pasaporte venezolano. Poco después recibieron una notificación del Cuerpo Nacional de Policía donde se les requeria que acudieran a comisaria por un "asunto de su interés" según el abogado.
Una vez en comisaría, se les pidió documentación y al no tener permiso de residencia, se les puso en propuesta de expulsión. Cuando la propuesta de explusión fue aprobada por la subdelegación del gobierno, los dos inmigrantes no la recorrieron, sino que aceleraron los tramites de regularización, convencidos que podrían demostrar fácilmente su arraigo, pero a pesar de todo, el 20 de Abril unos agentes de la policia nacional se presentaron en su domicilio a detenerles.