Hace 15 años | Por --117607-- a genciencia.com
Publicado hace 15 años por --117607-- a genciencia.com

[c&p] En los primeros meses de la Segunda Guerra Mundial, se detectó en los Estados Unidos un alarmante incremento de anemias ferropénicas entre los niños. Las autoridades encargaron a un presunto experto la búsqueda de un alimento rico en hierro para introducirlo en la dieta infantil. El comisionado leyó en un texto científico alemán que las espinacas contenían mucho hierro, sin fijarse en que se trataba de una errata de imprenta. Pero el mal ya estaba hecho.

Comentarios

Carme

anda que no me hicieron comer a mi espinacas lentejas e hígado de jovencita.... puaj (por entonces, ahora están riquísimas) lol

D

Mi profesora de química me explicó que el hierro de las lentejas no era asimilable por el cuerpo, ya que era de una valencia distinta a la que nosotros necesitamos. No sé si tenia valencia 2 o 3, pero ella dijo que nosotros necesitabamos la contraria.

Pero ojo, no lo he contrastado

D

Morcilla power!!!!!