Los familiares de las 94 personas que residen en La Pereda están dispuestos a plantar cara al Gobierno de Cantabria, a su vicepresidenta, a la directora del Icass y a quien haga falta. «De la Pereda no se mueve nadie».
Mi nombre no importa, tengo 91 años y padezco Enfermedad de Alzheimer.
Por ello no puedo valerme por mi mismo y necesito ayuda para actividades tan básicas como salir a la calle, asearme o comer.
Pero lo peor no es eso, sino aquellos días en los que no logro recordar bien quién soy ni donde estoy.
Por todas estas razones no puedo vivir solo.
Pero a pesar de ello, hasta hoy (7 de Mayo de 2012) han cuidado de mí en un sitio llamado CAD La Pereda, en Santander.
ES MI HOGAR, la única familia que tengo.
Acabo de enterarme de que quieren cerrar este centro, ya que dicen, que no cumple las condiciones necesarias para atenderme. No lo entiendo, pues desde que yo llegué (unos cuantos años atrás), llevan realizando obras para adaptarlo, gastando, para ello, un montón de dinero de todos.
¿ QUÉ A VA A SER DE MI ?
Todos tenemos MIEDO
Los que vivimos aquí
Nuestras familias
El personal que nos ayuda
Nos intentan consolar diciendo que no nos preocupemos, que nos piensan reubicar en otros centros, pero…
¡ SOMOS PERSONAS, no cosas que puedes llevar de un lado a otro, y por ello NOS DEBEN ESCUCHAR !
¿Se imaginan lo duro que fue dejar mi propia casa para venirme aquí?...ahora, como he dicho, este es mi hogar y quieren llevarme, de nuevo, a otro sitio que no conozco, con personas que no sé quién son y lejos de mi gente.
He luchado mucho en la vida, para que todo mejorase y poder, tan siquiera, vivir mis últimos días en paz.
Hoy es en este Centro para Mayores, pero mañana podría suceder en colegios de educación especial, guarderías, hospitales…
(Este, es sólo un caso redactado por profesionales que atienden, ayudan y comprenden a los usuarios de este tipo de centros. No obstante es una REALIDAD que todos sentimos cerca)
¡AYUDAMOS A DIFUNDIR ESTE MENSAJE!
Uno ya no sabe si nuestros gobiernos autonómicos o central están legislando con una pistola en la sien empuñada por una mano muy negra o les damos grima directamente.
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Mi nombre no importa, tengo 91 años y padezco Enfermedad de Alzheimer.
Por ello no puedo valerme por mi mismo y necesito ayuda para actividades tan básicas como salir a la calle, asearme o comer.
Pero lo peor no es eso, sino aquellos días en los que no logro recordar bien quién soy ni donde estoy.
Por todas estas razones no puedo vivir solo.
Pero a pesar de ello, hasta hoy (7 de Mayo de 2012) han cuidado de mí en un sitio llamado CAD La Pereda, en Santander.
ES MI HOGAR, la única familia que tengo.
Acabo de enterarme de que quieren cerrar este centro, ya que dicen, que no cumple las condiciones necesarias para atenderme. No lo entiendo, pues desde que yo llegué (unos cuantos años atrás), llevan realizando obras para adaptarlo, gastando, para ello, un montón de dinero de todos.
¿ QUÉ A VA A SER DE MI ?
Todos tenemos MIEDO
Los que vivimos aquí
Nuestras familias
El personal que nos ayuda
Nos intentan consolar diciendo que no nos preocupemos, que nos piensan reubicar en otros centros, pero…
¡ SOMOS PERSONAS, no cosas que puedes llevar de un lado a otro, y por ello NOS DEBEN ESCUCHAR !
¿Se imaginan lo duro que fue dejar mi propia casa para venirme aquí?...ahora, como he dicho, este es mi hogar y quieren llevarme, de nuevo, a otro sitio que no conozco, con personas que no sé quién son y lejos de mi gente.
He luchado mucho en la vida, para que todo mejorase y poder, tan siquiera, vivir mis últimos días en paz.
Hoy es en este Centro para Mayores, pero mañana podría suceder en colegios de educación especial, guarderías, hospitales…
(Este, es sólo un caso redactado por profesionales que atienden, ayudan y comprenden a los usuarios de este tipo de centros. No obstante es una REALIDAD que todos sentimos cerca)
¡AYUDAMOS A DIFUNDIR ESTE MENSAJE!
Uno ya no sabe si nuestros gobiernos autonómicos o central están legislando con una pistola en la sien empuñada por una mano muy negra o les damos grima directamente.