El motivo: la orquesta interrumpió su actuación por el fuerte viento y la amenaza de tormenta, lo que enervó a una parte del numeroso público asistente. Al parecer, los silbidos y abucheos «de una minoría» derivaron en una actitud tan violenta y hostil que los artistas se vieron obligados a pedir auxilio a la Policía Municipal para que les ayudaran a salir del lugar.
"«Me sorprendió que las que más gritaban eran las mujeres», recuerda la misma persona."
Pues no sé de que se sorprende. En casos de multitudes enfurecidas, las mujeres tienen mucha más mala leche que los hombres. Y si no, recordad las famosas tejedoras de la Revoluciòn Francesa, que tenían un sitio cogido en primera fila para los aguillotinamientos.
Comentarios
Farlopa pa la tropa. Ains,cuanto daño están haciendo los recortes en Osakidetza...
"«Me sorprendió que las que más gritaban eran las mujeres», recuerda la misma persona."
Pues no sé de que se sorprende. En casos de multitudes enfurecidas, las mujeres tienen mucha más mala leche que los hombres. Y si no, recordad las famosas tejedoras de la Revoluciòn Francesa, que tenían un sitio cogido en primera fila para los aguillotinamientos.
Los ancianos de Bilbao no se andan con chiquitas