El corresponsal de La Vanguardia se despide de China con otro de sus espectaculares trabajos sobre China. Ideal para quienes creen que otra forma de hacer periodismo es posible (y necesaria). Atención a los comentarios de lectores lamentando su marcha a Berlín y agradeciéndole su dedicación a los largo de estos años.
Siento que deje Pekín. A través de sus crónicas he podido seguir la fascinante y compleja transformación de China en estos años, y es el único periodista que conozco que ha sabido explicar y traducir matices que en otras crónicas quedan ocultos por los prejuicios.
Comentarios
Estupenda lectura. Uno de los pocos que se empeñan en pensar antes de escribir sobre China. Se le echará de menos.
Siento que deje Pekín. A través de sus crónicas he podido seguir la fascinante y compleja transformación de China en estos años, y es el único periodista que conozco que ha sabido explicar y traducir matices que en otras crónicas quedan ocultos por los prejuicios.
Rafael Poch es un verdadero maestro. No estaremos siempre de acuerdo con él en todo, pero sus crónicas son completísimas y de un nivel muy alto.