Hace 12 años | Por Marchenzeit a lavanguardia.com
Publicado hace 12 años por Marchenzeit a lavanguardia.com

Lejos de utilizar la retórica tabernario-imperial y de criminalizar los anhelos de las naciones que configuran un estado, Inglaterra usa el lenguaje de la democracia, y a partir de ahí despliega su estrategia para frenar la secesión. Por ello plantea una consulta con un simple sí o no a la independencia –sabedora que solo el 38% de los escoceses es favorable– y la quiere en pocos meses para restar tiempo a ampliar las cotas del sí. Al otro lado, el mismo tono de madurez social