Si acudir al cajero para engordar la cartera es un hábito, ahora también puede serlo para llenar la cesta de la compra. Porque Vitoria cuenta con su primer supermercado automático. Un negocio pionero en la ciudad que permite comprar un litro de leche o un paquete de detergente a través de una pantalla táctil en plena calle y llevárselo a casa en una bolsa a horas intempestivas. Hay secciones de alimentación general, platos preparados, aperitivos-snacks, bebida, caramelos-chicles, droguería-higien, parafarmacia, chocolate-bollería y una de adult
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Ofrece desde vibradores (entre 6,5 y 15 euros) y bolas chinas (15 euros) hasta muñecas hinchables, a 22.
Vamos, que los productos de alimentación y droguería son para disimular y salvar la cara de los compradores.
Si ya robaban antes... ahora ni te cuento...