Si como sostenía Josep Pla, la patria llega hasta donde uno dice bon dia y le responden bon dia, la ciudad de Valencia queda en tierra de nadie. El 90% de vecinos del cap i casal habla «poco o nada» en valenciano, según una encuesta de 2006. Es deci
Yo soy valenciano, y realmente no es que no sepamos hablarlo, es que no vemos necesario usarlo, si hay más gente que entiende el castellano, pues hablamos castellano, ahora, si nos hablan en valenciano, la mayoria responderiamos en valenciano, no somos tan cerrados como algunos catalanes; la lengua es para entenderse entre unos y otros, no para discutir.
#3 Eso puede ser cierto en tu caso pero la inmensa mayoría de castellanohablantes valencianos aunque les hables en valenciano te contestan en castellano.
Y me parece una falta de respeto negarse a aprender una de las lenguas del sitio donde naces o vives.
#3 Yo soy valenciano y me da vergüenza cómo los mismos valencianos pisoteamos nuestra lengua, no la utilizamos, la menospreciamos, renunciamos a educar a nuestros hijos en ella, nunca leemos un libro en ella, no reclamammos televisiones, radios, revistas, periódicos, etc. en ella, y la limitamos a una lengua para hablar en el bar, en el casal de falla, para decir cuatro gilipolleces, y no la convertimos en lengua de expresión cultural, científica, artística, legal... Una lengua con una tradición literaria tan antigua como el castellano, con incluso mayor riqueza si nos circunscribimos al arte poético.
Y encima somos del batallón suicida, y al revés que hicieron en Euskadi, que de siete variantes dialectales hicieron una lengua unificada, pretendemos la secesión de una de las variantes dialectales (que sí, la más diferenciada, pero tan variante dialectal como el mallorquín, el tortosino, el barceloní o el lleidatà), y convertir en una lengua de andar por casa a una lengua que tiene 4,4 millones de hablantes habituales, que son capaces de hablar 7,7 millones de personas y pueden comprender 10,5 millones de personas, y que se habla en cuatro países: España, Francia, Andorra (es lengua nacional) e Italia (Alghero) (Wikipedia dixit).
¿Deberíamos estar orgullosos o no, y no esconderlo debajo de la piedra? Lo que hay que dejarse es de tanto complejo de inferioridad y de tanto meninfotismo y reivindicar el valencianismo cultural (sin banderitas ni política, pero también sin miedo) YA!
El derecho es de las personas a hablar una lengua en sí, ellas deben elegir, no un derecho de la lengua a ser hablada. Es un derecho humano personal, cada uno se comunica como quiere, y si no le entienden ya sabe lo que hay que hacer.
Me atrevo a afirmar que parte de la culpa la tiene el nacionalismo catalán. En Valencia se detecta cierta reacción subconsciente contra cualquier sugerencia pancatalanista; en Cataluña el catalán se erigen continuamente como tema de discusión política contra España, y por tanto contra la mayoría de Valencia, creo eso ha alejado a mucha gente del valenciano. Si Cataluña se independizara un día quizás llegaría a perderse por completo el vínculo lingüistico
#6 Mas que el nacionalismo catalán, la tiene el nacionalismo español, que inculcó un miedo a un enemigo inexistente, "xe que els catalans mos furtaran la paella".
Comentarios
Yo soy valenciano, y realmente no es que no sepamos hablarlo, es que no vemos necesario usarlo, si hay más gente que entiende el castellano, pues hablamos castellano, ahora, si nos hablan en valenciano, la mayoria responderiamos en valenciano, no somos tan cerrados como algunos catalanes; la lengua es para entenderse entre unos y otros, no para discutir.
#3 Eso puede ser cierto en tu caso pero la inmensa mayoría de castellanohablantes valencianos aunque les hables en valenciano te contestan en castellano.
Y me parece una falta de respeto negarse a aprender una de las lenguas del sitio donde naces o vives.
#3 Yo soy valenciano y me da vergüenza cómo los mismos valencianos pisoteamos nuestra lengua, no la utilizamos, la menospreciamos, renunciamos a educar a nuestros hijos en ella, nunca leemos un libro en ella, no reclamammos televisiones, radios, revistas, periódicos, etc. en ella, y la limitamos a una lengua para hablar en el bar, en el casal de falla, para decir cuatro gilipolleces, y no la convertimos en lengua de expresión cultural, científica, artística, legal... Una lengua con una tradición literaria tan antigua como el castellano, con incluso mayor riqueza si nos circunscribimos al arte poético.
Y encima somos del batallón suicida, y al revés que hicieron en Euskadi, que de siete variantes dialectales hicieron una lengua unificada, pretendemos la secesión de una de las variantes dialectales (que sí, la más diferenciada, pero tan variante dialectal como el mallorquín, el tortosino, el barceloní o el lleidatà), y convertir en una lengua de andar por casa a una lengua que tiene 4,4 millones de hablantes habituales, que son capaces de hablar 7,7 millones de personas y pueden comprender 10,5 millones de personas, y que se habla en cuatro países: España, Francia, Andorra (es lengua nacional) e Italia (Alghero) (Wikipedia dixit).
¿Deberíamos estar orgullosos o no, y no esconderlo debajo de la piedra? Lo que hay que dejarse es de tanto complejo de inferioridad y de tanto meninfotismo y reivindicar el valencianismo cultural (sin banderitas ni política, pero también sin miedo) YA!
El derecho es de las personas a hablar una lengua en sí, ellas deben elegir, no un derecho de la lengua a ser hablada. Es un derecho humano personal, cada uno se comunica como quiere, y si no le entienden ya sabe lo que hay que hacer.
Me atrevo a afirmar que parte de la culpa la tiene el nacionalismo catalán. En Valencia se detecta cierta reacción subconsciente contra cualquier sugerencia pancatalanista; en Cataluña el catalán se erigen continuamente como tema de discusión política contra España, y por tanto contra la mayoría de Valencia, creo eso ha alejado a mucha gente del valenciano. Si Cataluña se independizara un día quizás llegaría a perderse por completo el vínculo lingüistico
#6 Mas que el nacionalismo catalán, la tiene el nacionalismo español, que inculcó un miedo a un enemigo inexistente, "xe que els catalans mos furtaran la paella".
Buena iniciativa.
Ahora, que comience el flame lingüístico. Dadme un momento que voy a por las palomitas