Hace 3 años | Por Papyrus a investigacionyciencia.es
Publicado hace 3 años por Papyrus a investigacionyciencia.es

Las huellas dactilares no son los únicos rasgos biométricos que nos distinguen. La forma de andar de cada persona es única y puede servir no solo para identificarla, sino también como un indicador de su estado de ánimo y su salud. Un equipo de investigadores ha desarrollado sensores remotos que analizan los pasos midiendo las pequeñas vibraciones del suelo, y los ha empleado para reconocer a individuos concretos que caminaban por un edificio y para ensayar un nuevo método de control del bienestar a distancia.