Muchas familias del tercer mundo no pueden permitirse paneles solares o aerogeneradores convencionales, que son muy caros y, cuando se rompen, son difíciles (o imposibles) de reparar para ellos. De ahí que la propuesta de Shawn Frayne sea interesante: este inventor de California ha diseñado un aerogenerador de pequeña escala y bajísimo coste que utiliza el flameo aeroelástico (la vibración inducida por el viento en una superficie elástica) para generar energía eléctrica.
Comentarios
Cualquier avanze en este sentido es bien recibido. Si dedicasemos la mitad del dinero que invertimos en el "circo" a la ciencia...
#1 Nosotros no invertimos en nada, son los "payasos" los que se llevan nuestro dinero.