Antes en los aseos públicos había dos puertas; en una ponía “Caballeros” y en la otra “Señoras”. Luego, la cosa se fue complicando y en los baños de algunos garitos de moda empezaron a colgar jeroglíficos muy cool pero indescifrables, sobre todo si la noche –junto con el ron– te “confunde”. Sin embargo, el escritor Manuel Vicent, en algunos sitios al menos, lo tiene bastante más fácil...
Comentarios
Eso si que es un homenaje!
Vicent,GCS
¡Se lo merece! Sus escritos son todos deliciosos en la forma y contundentes en el fondo.