Al fin alguien se ha dedicado a calcular los beneficios sociales y económicos del “fair use” en Estados Unidos, que es un equivalente a nuestra “copia privada“, pero mucho más restrictivo. Y el resultado es que gracias a el “fair use”, la economía estadounidense ha generado 2,2 trillones (trillones americanos) de dólares, frente a los 1.3 generados gracias a las leyes de copyright.
Igual sobra decirlo pero lo recordaré ya que es peligroso defender la copia privada por motivos económicos, pues por ahí también pueden saltar ciertas entidades indicando lo que podrían haber ganado en caso de cobrar por copias privadas. Para las entidades tipo SGAE es mucho más facil hablar de cuestiones económicas que de derechos en el tema del canon, que es lo que aquí nos atañe, y equivalente por decirlo de algún modo, sobre la copia privada.
Cuando se reivindica la copia privada se hace por una cuestión de derechos no de dinero.
La copia privada y la copia pirata también. Ya va siendo hora de darse cuenta de todo lo que aporta la llamada piratería a la industria musical (básicamente, mantener unos niveles dignos de demanda ante una oferta masiva artificial que es, en su mayoría, pura mierda).
Comentarios
Igual sobra decirlo pero lo recordaré ya que es peligroso defender la copia privada por motivos económicos, pues por ahí también pueden saltar ciertas entidades indicando lo que podrían haber ganado en caso de cobrar por copias privadas. Para las entidades tipo SGAE es mucho más facil hablar de cuestiones económicas que de derechos en el tema del canon, que es lo que aquí nos atañe, y equivalente por decirlo de algún modo, sobre la copia privada.
Cuando se reivindica la copia privada se hace por una cuestión de derechos no de dinero.
Nosotros vamos al revés.... poco tardarán en eliminar el derecho a copia privada que tenemos.
Dadles unos meses hasta después de las elecciones.
La copia privada y la copia pirata también. Ya va siendo hora de darse cuenta de todo lo que aporta la llamada piratería a la industria musical (básicamente, mantener unos niveles dignos de demanda ante una oferta masiva artificial que es, en su mayoría, pura mierda).