C&P. Las bellas palabras de Barack Obama resuenan por todos los rincones de Detroit y todo el mundo las escucha embelesado. Pero no dan de comer: el corazón industrial de Estados Unidos sangra por los cuatro costados y el colapso económico amenaza con no dejar ni rastro de lo que fue el gran símbolo del poderío estadounidense.
Comentarios
Detroit, ciudad de libros y películas... No sabía que la cosa andaba tan chunga.
Robocop ya lo predijo...